El epílogo de nuestro fantástico viaje por Guipúzcoa comienza en Tolosa, a orillas del río Oria. Tomamos la carretera GI-2130 en dirección a Navarra, vía que discurre por el valle de Elduain, un fantástico vergel irrigado por el río Elduarain.
Durante el ascenso por la carretera, junto al río Elduarain, pasamos por pequeñas aldeas y pueblos como Berrobi. Y el primer alto en la ruta lo realizamos en Elduain/Elduayen, pequeño y pintoresco pueblo situado en el corazón del valle.
El pueblo mantiene su encanto tradicional con casas de piedra, calles estrechas y una atmósfera tranquila. Junto a la carretera se alza la iglesia de Santa Catalina, que posee una portada románica del siglo XIII.
La iglesia fue erigida en su mayor parte durante el siglo XVI. Exteriormente, aparte de su portada románica, destaca por su torre barroca y su retablo renacentista del año 1600.
Junto a la iglesia de Santa Catalina, como no podía ser de otra manera, se halla el Ayuntamiento de Elduayen, edificio donde podréis obtener información acerca del municipio y el valle.
Berastegui se encuentra en la cabecera del valle de Elduain y está rodeado de un hermoso paisaje montañoso, ideal para realizar actividades al aire libre.
Si dejáis el coche cerca de la carretera, tardaréis un par de minutos en situaros en la plaza del Pueblo (Herria). La plaza llama la atención por los edificios de típica arquitectura tradicional vasca.
En la plaza Herria se encuentra el Ayuntamiento de Berastegui, un edificio porticado, de dos plantas de altura, que presenta un gran escudo nobiliario en su fachada principal.
Si os asomáis por la fachada posterior del Ayuntamiento veréis la iglesia de Santa María de Tours, edificio básicamente gótico, datado en 1505, que destaca por estar bastante alejado del núcleo urbano.