Esa mañana, cuando nos dirigíamos al Museo Vasco del Ferrocarril, descubrimos en la orilla izquierda del río Urola el viejo hospital y la ermita de la Magdalena. En el siglo XVI, el hospital acogía a los enfermos más pobres del municipio.
A mediodía, tras la fabulosa visita que realizamos al Museo Vasco del Ferrocarril, nos acercarmos al casco viejo de Azpeitia por la avenida Julián Elorza. El centro de la villa se localiza en la margen izquierda del río Urola, a los pies del macizo de Izarraiz.
La plaza Pérez Arregui nos condujo hasta la iglesia de San Sebastián, de origen templario. Construida entre los siglos XVI y XVIII, sufrió grandes reformas, conservándose sólo la antigua torre.
La iglesia alberga un valioso retablo mayor, así como una serie de capillas laterales con interesantes obras de arte religioso. El pórtico original fue reemplazado en 1771.
En la plaza de la Iglesia, frente al pórtico, podréis ver el Palacio de Antxieta (siglo XVI), un magnífico ejemplo de arquitectura mudéjar en el valle de Iraurgui.
Las calles Santiago y Eliz unen la iglesia de San Sebastián con la plaza Mayor (Nagusia), la principal de Azpeitia. De los edificios históricos que la rodean, cabe destacar el Ayuntamiento, construido en 1711 como convento de Agustinos.
Por detrás de la plaza Mayor, en la calle Eliz, podréis ver la Casa Altuna, construida en el siglo XVI por los Altuna, uno de los linajes más antiguos de Azpeitia. El edificio es de piedra sillar hasta el segundo piso. El resto de la fachada muestra una estructura mudéjar realizada en ladrillo.
Nos sumergimos nuevamente en el entramado de estrechas calles que componen el centro histórico. En la calle Enparan descubrimos el Palacio Basazábal, de los siglos XIV-XV, considerado como la obra civil original más antigua de Azpeitia.
La fachada principal, de marcado sabor gótico, es sencilla, aunque el gran arco de medio punto de la portada formado por descomunales dovelas y los trabajados ventanales, denotan una construcción cuidada.
El palacio cuenta con un patio central poco común en Guipúzcoa y con unas bellas arcadas que forman las galerías de la fachada abierta hacia el río Urola.
En la margen derecha del río Urola, cruzando el puente de piedra, se llega a la Casa Torre de Enparan, del año 1320. Fue levantada por una de las más poderosas familias de "Parientes Mayores" del País Vasco, perteneciente al bando de Oñaz.
A un par de kilómetros al sur de Azpeitia, en una explanada situada en la margen derecha del río Urola, se levanta el santuario de Loyola, compuesto por una serie de edificios que se han ido erigiendo en torno a la casa-torre medieval.
En el centro del recinto sobresale con fuerza la basílica de Loyola, dominada por una cúpula y precedida por un amplio pórtico decorado en estilo churrigueresco, modalidad exuberante del barraco español.
La iglesia del Santuario fue inaugurada en 1738, 50 años después del comienzo de las obras. La cúpula alcanza los 65 metros de altura con la linterna y la cruz de remate. El altar mayor fue realizado entre 1750 y 1757.