La primera parada de esta corta ruta corresponde a Tembleque, precioso pueblo manchego, famoso por su impresionante plaza Mayor y su arquitectura tradicional.
Nos presentamos en Tembleque antes de mediodía, tras visitar Orgaz y Mora. Estacionamos el vehículo junto a la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, uno de los edificios más destacados de la villa.
La iglesia parroquial fue construida entre los siglos XVI y XVII, con un bello estilo renacentista. Destaca por su gran torre de piedra y su retablo mayor.
Cerca de la iglesia, desde la plaza de la Orden, tenéis el acceso sur a la plaza Mayor de Tembleque, el gran icono de la villa.
Tembleque es una villa relativamente pequeña para la enorme plaza Mayor que tiene. Esto es lo primero que me llamó la atención nada más poner el pie en ella.
De estilo barroco con influencias mudéjares, la plaza destaca por sus soportales de madera y sus grandes casonas de dos plantas de fachadas encaladas y amplios balcones con barandillas de madera.
La plaza acoge el Ayuntamiento, un bello edificio del siglo XVI. En su interior se localiza la oficina de turismo de Tembleque.
No cabía duda alguna. Me hallaba en una de las plazas mayores más hermosas de España. Declarada Conjunto Histórico, sirvió de corral de comedias, coso taurino y mercado.
Aparte de la iglesia y la plaza Mayor, Tembleque también acoge interesantes edificios, como las ermitas de la Vera Cruz y de la Purísima, o la Casa de las Torres, un majestuoso palacio barroco del siglo XVIII. Su fachada con escudos nobiliarios y su gran portón de madera son impresionantes.
Situados en los alrededores de Tembleque, los molios de viento evocan la esencia del Quijote y La Mancha. Si tenéis tiempo podéis acercaros a algunos de ellos.
A 32 kilómetros al norte de Tembleque, avanzando por la A-4, alcanzamos Ocaña, villa histórica que posee un rico patrimonio histórico y arquitectónico.
TOPÓNIMO DE OCAÑAComo ocurre en Tembleque, el plato fuerte de Ocaña radica en su plaza Mayor, una de las más monumentales de Castilla-La Mancha.
De estilo barroco, con soportales y balconadas de hierro forjado, la plaza Mayor de Ocaña, ha sido escenario de mercados, fiestas y espectáculos taurinos.
Los principales monumentos de Ocaña están datados entre los siglos XV al XVIII. Entre los más antiguos se halla el Rollo de Justicia, una picota de piedra del siglo XV. Junto a él podréis admirar el teatro Lope de Vega, de los siglos XVI-XIX (antiguo colegio de Jesuitas).
Al norte de la ciudad no debéis perderos la Torre y Portada de San Martín, templo construido en el siglo XVI. Lo que veis es todo lo que queda de la desaparecida iglesia de San Martín.
![]() Torre de San Martín. Ocaña |
![]() Torre y Portada de San Martín. Ocaña |