Llegamos a la sierra de Alcaraz a media tarde, procedentes de Segóbriga y Belmonte, en la provincia de Cuenca. La ruta fue larga, con temperaturas muy altas, entre los 37 y 38 grados. Cuando llegamos a Alcaraz, a 962 metros de altura, la temperatura se suavizó un poco.
Alcaraz se asienta sobre una colina arcillosa, en un bonito paraje natural en el que los ríos surcan pequeños y frondosos bosques. Un paseo por sus calles nos debe conducir a la porticada plaza Mayor, declarada Conjunto Histórico-Artístico.
La plaza Mayor es un rectángulo irregular, con arquerías en tres de sus lados (las lonjas). Tiene un estilo renacentista uniforme, de clara influencia italiana, que hace que el conjunto sea excepcional. Alberga el pósito o granero y el Ayuntamiento o lonja del Alhorí, ambos del siglo XVI.
En la plazuela de la Trinidad, situada en una esquina de la plaza Mayor, se encuentran dos de los monumentos que más se asocian con la imagen de la villa: la lonja de Santo Domingo, del siglo XVIII, adosada a la torre del Tardón o del Reloj, y la iglesia de la Trinidad.
Lo que más destaca de ambos edificios son sus dos torres renacentistas anejas, la de la iglesia y la del Tardón, ambas obra del arquitecto alcaraceño Andrés de Vandelvira.
La lonja de Santo Domingo, al más puro estilo de la logia italiana del 'cinquecento', constituye el resto del antiguo convento de este nombre. Esta lonja tiene cinco arcos, y destaca sobre el arco central una galería superior con un enorme escudo de Felipe II.
En la iglesia de la Trinidad (siglos XIV y XV) se observan distintas fases del gótico y una colección de estatuas policromadas. En su exterior, además de la torre de la plaza Mayor, encontramos la portada de un gótico muy avanzado, con bellísimas arquivoltas flamígeras.
La portada del Alhorí se levanta en la calle Mayor, contigua al palacio del Ayuntamiento. Es de labra plateresca. Se trata de un arco de medio punto flanqueado por columnas labradas y rematados por elementos arquitectónicos igualmente labrados de forma primorosa.
La Portada de Alhorí encabeza la calle Mayor, contigua a la plaza Mayor. Si camináis por ella veréis bonitas fachadas de piedra pertenecientes a viejas casonas, e incluso pasaréis bajo un curioso arco.