Mont-rebei desde Pont de Montañana |
Esta ruta comienza en Lleida, adonde llegamos procedentes de Barcelona por la A-2. Tomamos la N-230 en dirección al Valle de Arán y, entrados en la provincia de Huesca, realizamos una breve parada en Benabarre, concretamente en la chocolatería Brescó, localizada junto a la carretera. Recomiendo encarecidamente que realicéis una parada para probar un exquisito chocolate a la taza.
Chocolates Brescó. Benabarre |
Chocolates Brescó. Benabarre |
Continuando por la N-230 alcanzamos Pont de Montanyana, población oscense asentada junto al río Noguera Ribagorzana, en el límite con Cataluña. Al otro lado del río, en las afueras del pueblo, ya pudimos contemplar las montañas verticales que custodian el congosto de Mont-rebei.
Mont-rebei desde Pont de Montanyana |
Río Noguera Ribagorzana. Montanyana |
El río Noguera Ribagorzana, al atravesar la sierra del Montsec, ha creado un inmenso corte de paredes verticales. Se trata de la Reserva del Congost de Mont-rebei, un espacio de unas 600 hectáreas que fue creado con el objetivo de preservar sus valores naturales y paisajísticos. El desfiladero se encuentra en el Prepirineo catalán y aragonés, y está recorrido por dos sendas (una en cada territorio), siendo la más accesible la del lado catalán.
Pont de Montanyana es el origen de la carretera local que, por territorio leridano, conduce a la entrada norte de Mont-rebei. Esperaba asfalto, pero no fue así. Una pista de tierra más o menos en buen estado nos condujo, en algo más de diez minutos, hasta el aparcamiento norte del desfiladero, sumido en un barrizal. Al menos era gratuito. Aquí comenzaba la senda propiamente dicha.
Río Nog. Ribargozana desde el aparcamiento |
Inicio de la senda |
La senda abandona el aparcamiento y va ganando altura progresivamente. A mano derecha veremos las aguas del río Noguera Ribagorzana, retenidas por el embalse de Canelles. Si el nivel está alto veréis cantidad de plantas acuáticas.
A continuación, tras pasar bajo la primera pared vertical del recorrido, accederemos al puente colgante, metálico, de unos 30 metros de longitud, que atraviesa una riera a la altura del embalse.
Puente colgante |
Puente colgante |
Y al otro lado del puente, la senda nos condujo hasta las paredes verticales del congosto, una estrecha grieta que fue abierta por el río Noguera Ribagorzana a lo largo de miles de años, separando la sierra del Montsec y, actualmente, Cataluña de Aragón.
Recorrimos todo el desfiladero por la angosta senda, deteniéndonos en los miradores y teniendo mucho cuidadado de no acercarnos al borde, ya que no existen barandillas ni protecciones anticaídas. En algunos recovecos del congosto tuvimos unas vistas espectaculares del río Noguera Ribagorzana, con sus aguas retenidas por la presa de Canelles. El pantano, como muestro en alguna foto, es idóneo para la práctica del piragüismo.
Por la tarde, después de almorzar en el vertiginoso mirador del túnel, en Mont-rebei, marchamos hacia Tremp por la carretera comarcal C-1311. A mitad de camino nos detuvimos en el puerto de Montllobar, cuya cresta nos ofreció una interesante perspectiva de los Pirineos y de Tremp, la capital del Pallars Jussà.
Puerto de Montllobar |
Tremp desde Montllobar |
Quince minutos tardamos en descender del puerto y alcanzar la localidad de Tremp. Realizamos un agradable paseo por la villa, prestando atención a su núcleo antiguo, organizado en torno a la basílica de la Mare de Déu y al desaparecido recinto amurallado.
Basílica de Tremp |
Basílica de Tremp |