mundo
JOSECANOVAS.COM


Grandes viajes - España - Pirineos
Mis libros sobre Interrail
Diccionario etimológico y toponímico
Primer Interrail: Círculo Polar Ártico   Julio 1991
Francia I Países Bajos I Dinamarca I Noruega I Suecia I Alemania I Chequia I Hungría I Austria I Italia I Suiza I Mónaco I Vaticano
botonsubir1
Mi primer Interrail, un pase global de un mes de duración por todos los países miembros, lo realicé en 1991 junto a mis amigos Isidoro y Fernando, poco después de la caída del Muro de Berlín y la desmantelación de los antiguos regímenes comunistas en los países del Este.

El principal objetivo, tal y como relato en mi libro "Raíles 1: Tulipanes y vikingas", consistió en alcanzar en tren el Círculo Polar Ártico para contemplar el Sol de Medianoche, con luz constante las 24 horas del día. La magia de Escandinavia y de sus aguerridas vikingas marcó el inicio de nuestra posterior aventura por el centro de Europa, con Suiza como nexo de unión.


primerinterrail


  • Transportes: Trenes de segunda clase, cercanías, TGV y ferries.
  • Alojamientos: Youth hostels y apartamento en Praga.
  • Lo mejor:
    - Nuestro periplo por Noruega: sol de medianoche, chicas vikingas...
    - Arrancar un pedazo de piedra del muro de Berlín.
    - Las playas de la Costa Azul.
    - Los lagos, paisajes y ciudades suizas. ¡Fue fascinante!
  • Lo peor:
    - Las noches de tren por los países del Este.
    - Cambiar de divisa cada vez que cambiabas de país.



Etapa 1: Círculo Polar Ártico

1. París y Ámsterdam

La primera parte del Interrail transcurre por el oeste de Europa, visitando París y Ámsterdam, dos viejas conocidas para mí tras el viaje de fin de curso que realicé en mi Instituto a los Países Bajos.

VER PARÍS


triunfo
Arco del Triunfo. Campos Elíseos (París)

1991
Ámsterdam


2. Copenhague

A continuación penetramos en Escandinavia. Pasamos un día en Copenhague, la capital de Dinamarca. Como hiciéramos en Ámsterdam, aquí también alquilamos unas bicicletas. Vimos la ciudad de maravilla.


sirenita
La Sirenita. Copenhague

amalienborg
Palacio de Amalienborg. Copenhague


3. Oslo y Laponia

Llegamos a Oslo de buena mañana, en el tren nocturno procedente de Copenhague. Vimos el centro de la ciudad, la fortaleza, el puerto y el Palacio Real, y a media tarde partimos hacia Bodo y el Círculo Polar Ártico, en Laponia, en busca del Sol de Medianoche.

VER LAPONIA


oslo
Estación Central de Oslo


4. Estocolmo

A partir de Trondheim, el Interrail prosigue abordando un nuevo tren nocturno hacia Estocolmo. Una visita al centro histórico y un fugaz baño en el lago Mälar marcan nuestro paso por la capital sueca.


malar
Lago Mälar. Estocolmo



Etapa 2: Del Báltico al Adriático

1. Berlín

Una nueva travesía por el Báltico nos conduce a Alemania. Dos días en Berlín, con una buena parte de su muro aún en pie, es la tarjeta de bienvenida a los países del Este, cuyo régimen comunista acaba de pasar a mejor vida.

VER BERLÍN


puerta
Puerta de Brandenburgo. Berlín


2. Praga

La bucólica Praga todavía formaba parte de Checoslovaquia en 1989, cuando mis colegas y yo la visitamos. Dos días dieron mucho de sí, mucho más que las fotos que tomamos. Cosas de los carretes y del caro revelado.


praga
Puente Carlos. Praga

praga2
Iglesia de Tyn. Praga


3. Budapest

Budapest, la encantadora capital de Hungría, nos sorprendió a todos por su belleza y sus precios bajos. Lo que no agradó tanto fueron los cambios de divisas y los férreos controles policíales que nos sorprendieron en las fronteras de estos países. Bendita Unión Europea de hoy día.

VER BUDAPEST


mirador
Budapest desde el Palacio Real


4. Múnich

El centro de Europa ocupa la siguiente etapa del Interrail. Un tren nocturno nos lleva desde Budapest a Múnich, ciudad bávara que recorrimos en bicicleta.


olimpico
Estadio Olímpico de Múnich


5. Viena

En nuestro deambular por el centro de Europa, no quisimos perder la oportunidad de visitar Viena. Dos días fueron suficientes para disfrutar de su rico legado arquitectónico.


viena
Museo de Historia Natural. Viena

La avenida Ring concentra los principales edificios históricos de Viena. Recorrimos a pie sus cuatro kilómetros de longitud, en forma de semicírculo, admirando de cerca bellas construcciones barrocas, como el palacio Hofburg (residencia de los antiguos reyes austriacos), o los museos de Bellas Artes y el de Historia Natural.


viena2
Parlamento de Austria. Avenida Ring. Viena

Montar en una de las enormes vagonetas de la Noria de Viena, la Riesenrad, fue el único capricho de pago que nos permitimos en Viena (es lo que ocurre cuando tienes veinte años y viajas con Interrail).


viena3
La Noria de Viena


6. Venecia

Esta brillante etapa concluye a orillas del mar Adriático, en Venecia, la primera ciudad italiana que visitamos durante este intenso Interrail.


venecia
Gran Canal. Venecia

Una jornada en la Ciudad de los Canales dio mucho de sí: Puente de Rialto, plaza de San Marcos, Puente de los Suspiros...; en fin, que nos movimos siempre a pie por los principales puntos de interés de la villa.


venecia2
Puente de Rialto. Venecia
venecia3
Plaza de San Marcos. Venecia



Etapa 3: Suiza va, Suiza viene

1. Lucerna

La última parte del viaje la dedicamos casi por completo a visitar hermosas ciudades de la sorprendente y montañosa Suiza. E iniciamos esta apasionante aventura en Lucerna y su lago, el de los Cuatro Cantones, que nos deparó un agradable baño en sus frías aguas.


lucerna
Lucerna y lago de los Cuatro Cantones

lucerna3
Playa de Ufschötti. Lucerna

Lucerna destaca por los puentes medievales de madera que atraviesan el río Reuss: el Spreuer y el Puente de la Capilla, o Kapellbrücke, con su Torre del Agua.


lucerna2
Puente de la Capilla. Lucerna


2. Colonia

Debíamos emplear una noche en el interior de un tren. Y en la estación de Lucerna apareció el expreso nocturno que unía Suiza con Países Bajos. Relizaba parada en Colonia, ciudad de Alemania emplazada a orillas del río Rin. La visita a su catedral gótica, una de las más monumentales de Europa, marcó nuestro paso por la ciudad.


colonia
Catedral de Colonia


3. Zúrich

Zúrich, el motor financiero de Suiza, fue la segunda ciudad helvética que atrapamos en nuestras redes. Nos quedamos dos días, con una estancia en el albergue juvenil situado junto a su espigado lago.


zurich
Lago de Zúrich

El centro histórico de Zúrich se desparrama por las colinas que abrazan al río Limago. Un paseo por sus calles mediavales debe incluir la orilla del río y la catedral Grossmunster, con sus icónicas torres gemelas.


zurich2
Catedral y río Limatt o Limago. Zúrich



4. Mónaco y la Costa Azul

Suiza constituye el nexo de unión para descubrir encantadores rincones de Europa, como la elitista Costa Azul francesa, capitaneada por Cannes y Niza.

VER COSTA AZUL


niza3
Promenade de los Ingleses. Niza

Y dentro de la Costa Azul, el Principado de Mónaco constituye un punto y aparte. Aterrizar en uno de los países más pequeños del mundo nos fascinó. Visitamos La Roca, así se llama el casco viejo, con baño incluido en la playa de los Pescadores.

VER MÓNACO


sanmartin
Mirador de la Porte Neuve. Mónaco



5. Lago Lemán (Suiza)

Las dos siguientes jornadas del Interraíl transcurren de nuevo en Suiza, cocretamente a orillas del lago Lemán, visitando Ginebra y Suiza. El símbolo de Ginebra es el Jet d’Eau, un chorro de Agua de 140 metros de altura situado en el Lago Lemán.


ginebra
Jet d’Eau. Ginebra

Nuestro paso por Lausana fue sensacional. Pasamos la mañana en una playa del lago Lemán y por la tarde nos aupamos en funicular hasta el centro histórico.


lausana
Palacio Rumine. Lausana


6. Roma

Queríamos emplear una nueva noche en tren, e Italia se postuló como principal objetivo. El expreso nocturno entre Ginebra y Roma, con parada en Lausana, nos catapultó a la Ciudad Eterna. Llegamos de buena mañana a su estación Central.


roma
Monumento del Vittoriano. Roma

No se puede ver Roma en un día, hicimos lo que buenamente pudimos. Y la cosa salió bien. Nuestro paseo comenzó en los Foros Imperiales, desde el Monumento del Vittoriano hasta el Coliseo y el Arco de Constantino.


roma2
El Coliseo. Roma
roma3
Arco de Constantino. Roma

Durante el Interrail habíamos visto una buena parte de los países Europa occidental y central. Y en el corazón de Roma, no quisimos perdernos la Ciudad del Vaticano, el estado soberano más pequeño del mundo. Eso sí, por vestir con bermudas, no nos permitieron el acceso a la Catedral de San Pedro. Qué se le va a hacer.


vaticano
Ciudad de Vaticano

La visita a la capital italiana continúa por la Roma barroca, la de la plaza Navonna, la de la Fontana de Trevi y la de la plaza de España, con sus escaleras atiborradas de turistas. Una jornada en Roma dio mucho de sí, más de lo que imaginábamos.


roma4
Fontana de Trevi. Roma


roma5
Plaza de España. Roma


7. Berna

Un nuevo tren nocturno nos llevó desde Roma a Suiza. El final del Interrail estaba cerca, y no quisimos perder la oportunidad de visitar Berna, la capital helvética.


berna
Confederación Helvética. Berna

Berna nos sorprendió por su bello casco antiguo medieval, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Rodeado por el río Aare, sus calles están repletas de viejas fuentes con figuras.


berna2
Centro histórico de Berna





logointerrail


INTERRAILES



fotocolumna


DESTINOS





deile