Fornells es un encantador pueblo de pescadores situado en la orilla occidental de una amplia bahía (Cala Salada). El pequeño puerto y sus calles peatonales invitan a un apacible paseo. Y en verano, sus playas apartadas y vírgenes invitan al descanso.
Con este nombre, Playas de Fornells, existen un buen puñado de calas desparramadas por la costa norte de Menorca: Cala Tirant, Cavalleria, Binimelà y Pregonda. Nuestro objetivo para esa mañana era Cala Pregonda, la más retirada.
Bienvenidos a las playas de Fornells
Cala Tirant
PLAYA DE BINIMELÀ
Para llegar a Cala Pregonda tuvimos que estacionar el coche en el carril que une Fornells con la playa de Binimelà, un extenso arenal salpicado de pequeñas lagunas.
Playa de Binimelà
Nos podíamos haber quedado en Binimelà, bañándonos en estas aguas prístinas en compañía de esquivos patos. De hecho, no había muchos bañistas; aun así, decidimos aventurarnos hacia Pregonda bajo un achicharrante sol.
Patitos en la playa de Binimelà
CALA PREGONDA
Lo tildé de auténtica locura: caminar durante 20 minutos bajo el sol, por un camino de tierra que recorría la accidentada costa norte. El consuelo del baño se vería trastocado cuando tuviéramos que regresar a Binimelà unas horas más tarde.
Sendero entre Binimelà y Pregonda
Cala Pregonda es la joya de la corona de la costa norte menorquina: arena rojiza, aguas cristalinas en una bahía cerrada por pequeños islotes, pocos bañistas; en fin, el paraíso para darse buenos baños y relajarse.
Llegamos a Cala Pregonda
Cala Pregonda
Cala Pregonda, gracias a sus pozas de poca profundidad en un entorno de rocas, es ideal para la práctica del buceo. No olvidéis llevar unas buenas gafas de inmersión. Bucear a pulmón, rodeado de peces de colores, fue maravilloso.
Cala Pregonda
Lo que no me gustó de la cala fue que no había ni un árbol bajo el que guarecerse del sol del mediodía, ni chiringuitos donde adquirir bebidas frescas. Menos mal que el baño en esas estupendas aguas dejó en un segundo plano estos inconvenientes.
Cala Pregonda
FORNELLS, EL PUEBLO
Estábamos en temporada de baño y, cuando hablamos de las Baleares, eso significa que a primera hora de la mañana se debe priorizar la playa. Conviene llegar de los primeros. Por eso dejamos Fornells para el final, en este caso, la visitamos a primera hora de la tarde.
Fornells desde el puerto
El pueblo se asienta en la bahía de Fornells, uno de los puertos naturales más grandes de la isla, con unos 5 km de longitud y hasta 2 km de anchura.
Puerto de Fornells
Puerto de Fornells
La plaza Pere M. Cardona organiza el centro histórico de Fornells. De aquí parte la peatonal calle Mayor y aquí se alza la iglesia de Sant Antoni Abad, que destaca por su fachada blanca.
Iglesia de Sant Antoni Abad
Me gustó mucho esta pequeña villa marinera, con sus casas encaladas, su muelle con los laúdes o llaüts (pequeñas embarcaciones), sus playas dentro de la bahía y su ambiente muy relajado.
Calle Mayor
Calle Mayor
Consejos e información útil
- Fornells está a 27 km de Mahón y a 35 km de Ciutadella.
- Si os movéis por la zona en verano y queréis tomar un baño, dejad la visita a Fornells para el final.
- En Fornells encontraréis casas blancas, calles tranquilas y un paseo marítimo largo lleno de barcas y restaurantes.
- La villa es famosa como “capital gastronómica” de Menorca por su caldereta de langosta, uno de los platos más emblemáticos de la isla.
- El municipio acoge Cap des Port, un yacimiento con restos de una basílica paleocristiana.
- La playa de Binimelà está a unos 15 minutos en coche por carril de tierra.
- Cala Pregonda está a unos 20 minutos a pie de la playa de Binimelà.
- Llevad gorra, gafas de sol, crema solar, bebida, escarpines, gafas de buceo y una sombrilla para el sol (no hay sombras).
Costa occidental de Menorca
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