- Varios autobuses comunican el centro de Roma con las termas de Caracalla.
- Las termas de Caracalla son de pago. Si vais en verano, se recomienda visitarlas evitando las horas centrales del día, pues hay zonas que no están cubiertas.
- La visita os llevará algo más de una hora. No tengáis prisa y quedaos con los detalles.
- Gracias a las pasarelas, podréis recorrer los baños y admirar los mosaicos.
- Las termas han inspirado el diseño de edificios de nueva factura en distintas partes del mundo.
- Visitas:
1/ Vía de las Termas de Caracalla.
2/ Mitreo y jardín.
3/ Habitaciones y baños. - Alojamiento: B&B Domus Domas de Roma.
- Lo mejor:
- Los mosaicos de la sala de baño.
- La altura que alcanzó el edificio, aún hoy impresiona. - Lo peor:
- Era el último día en Roma y tuvimos que movernos con las mochilas a cuestas.
La zona elegida para la edificación de las termas era un enorme jardín conocido como horti Asiniani, desarrollado por Cayo Asinio Polión durante el reinado del emperador Augusto.
Exterior de las termas
En los lados este y oeste se construyeron dos grandes exedras laterales y simétricas. En el espacio central había un ábside precedido por una columnata con pequeños locales a cada lado, uno de los cuales tenía forma octogonal y estaba cubierto por una cúpula.
Entrada a las termas. Mitreo
Entrada a las termas. Mitreo
En la parte norte había un pórtico, procedido por una serie de locales en dos niveles, en los cuales probablemente se ubicaban varias tiendas. El pórtico y las habitaciones servían como soporte estructural de la colina del Celio.
Muro oeste
En el lado sur se encontraba el medio estadio, con gradas para los espectadores, que servían para ocultar las grandes cisternas que había detrás de ellas. Estas cisternas podían contener un total de 80.000 metros cúbicos de agua. Situadas simétricamente, había dos grandes estancias más, que seguramente sirvieron como bibliotecas.
Acceso a la sala de baño
Las habitaciones de las Termas se diseñaron simétricamente entorno al eje central de los baños, siguiendo el modelo habitual de la Roma Imperial. En ambos lados había dos entradas que llevaban a los vestuarios, con un corredor central que conducía a dos habitaciones: las palestras.
La Palestra
El suelo estaba decorado con mosaicos, del cual han sobrevivido grandes fragmentos. En su momento fueron excepcionalmente bellos y de hermosos colores. Desde los vestuarios, los usuarios podían acceder al gimnasio, donde practicaban ejercicios físicos, y luego podían dirigirse a la termas, usadas conjuntamente por ambos sexos.
 Sala Natatio (baños) |
 Sala Natatio (baños) |
El Caldarium tenia una enorme sala circular cubierta por una cúpula. La habitación fue diseñada y situada dentro del complejo para recibir la luz del sol a lo largo del día mediante grandes ventanas. Había una estancia que albergaba una gran piscina descubierta.
El Caldarium
Tan importante como el diseño fue la decoración. Además de los ricos y vívidos mosaicos del suelo, los baños fueron decorados con valiosas obras de arte, como por ejemplo el Hércules Farnesio o el Toro Farnesio, ambos ahora en el Museo Arqueológico de Nápoles.
Apodyterium (Sala Natatio)
Los mosaicos no tenían siempre el mismo diseño, en algunas áreas representaban escenas, y en otras había suelos con motivos geométricos.
Apodyterium (Sala Natatio)
Las termas estuvieron completamente operativas en el siglo V cuando se las consideraba una de las siete maravillas de Roma. Olimpiodoro de Tebas menciona una capacidad de 1.600 personas al mismo tiempo, por los que diariamente pasarían por los baños entre 6.000 y 8.000 personas.
Apodyterium (Sala Natatio)
Las Termas de Caracalla eran un gran complejo de baños de agua caliente. El problema del abastecimiento fue fácilmente resuelto, pero calentar el agua fue un problema más complejo. La solución consistió en un horno interior y otro exterior, en el cual se encontrarían los esclavos avivando las llamas.
 El Frigidarium |
 El Frigidarium |
En función de la habitación a la que estuviera destinada, las aguas se calentaban a una temperatura o a otra. Para mejorar la difusión del calor, se construyó el sistema del hipocausto, bastante práctico y eficaz.
El Frigidarium
El hipocausto cumplía la función de calentar el edificio, un sistema de suelo radiante que funcionaba con la combustión subterránea de carbón y madera que calentaba agua transportada gracias a un acueducto. Las termas eran gratuitas y abiertas al público.
El Frigidarium
El Frigidarium era utilizado como punto de encuentro por los romanos que frecuentaban las termas. Desde aquí se dirigían a una de las estancias del complejo termal, en especial a la sala de baños.
El Frigidarium
El Frigidarium era una sala monumental similar a una basílica. Esta sala, en concreto, ha inspirado la arquitectura de muchos edificios públicos, como las termas de Diocleciano y la basílica de Masencio.
El Frigidarium
A principios del siglo XX, el diseño de estas termas se utilizó como inspiración para el diseño de la estación de trenes Pensilvania, en Nueva York. El edificio de la Asamblea Nacional de Bangladés, en Daca, también se inspira en las termas de Caracalla.
El Frigidarium
Con el pasar del tiempo, las termas fueron despojadas de sus esculturas y demás riquezas. Se conservan aún enormes fragmentos de mosaicos de los cuales algunos corresponden a la planta superior del edifico, el cual se había desplomado.
Detalle de la planta superior
Desde el siglo XII se comenzaron a extraer sillares para la construcción de otros edificios y se reutilizaron piezas decorativas en iglesias y palacios, como la catedral de Pisa y la iglesia de Santa María de Trastevere, en Roma.
Jardín de las termas
A partir del siglo XIV diferentes Papas extrajeron sillares, columnas, mármol travertino y otras piedras antiguas de las termas de Caracalla para la basílica de San Pedro y el palacio del Cardenal, en el Vaticano.
Jardín de las termas
